A la luz del día
Ante una escena amorosa
Un par de tórtolas revolotean bajo las sábanas.
La hembra cabe el hombre está,
Con su dulce boca contra la oreja suya
Hace nacer de ella, una flor púrpura.
Desde el fondo de su alma brotan las hojas
En olas verdes y violetas,
Entre olores celestiales y vistas suntuosas.
Hacia ti, crece la flor
Hasta que no puedas más con su potente
vigor
“¡Para! ¡Para! Para siempre, te lo pido”
--exclamó
“Por cual razón, te pregunto amor mío”
--imploró
Según la mujer remedio no quedó,
Y sin demora ninguna, ella siguió.
El hombre, so pretexto de salvarse el alma
se
lo impidió
Dejo caer sobre ella, la flor marchita,
muerto
el amor
“Tras tu flor perfumada, no ando yo.”
A la luz del día,
Ante una escena tenebrosa,
una flor muerta queda enterrada
Bajo las sábanas.
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